jueves, 4 de febrero de 2010

Un corazón inerte


un corazón inerte
ilusionado e inerme,
en larga espera duerme
contemplando su suerte

y así espera un indulto
del amor infinito
del que a hecho un monolito
del que a vuelto su culto

le obsesiona la idea
de amor hacer su imperio
tener en cautiverio
a aquello que el desea

un tierno y frágil beso
que le deje impávido
beso de amor ávido
beso que este de el preso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario